viernes, 15 de junio de 2007

Haciendo ejecutar mi título...

Esta noche me quedo en casa de Francisco, ese ser del que siempre hablo, que siempre dice tonteras y que claro, yo me rio de ellas. Es que desde mi cumpleaños que le debo una borrachera por que el café no dá para tanto, ni siquiera a las cosas no animadas se les pude exigir tanto y el café no va a ser la excepción, ahora repasamos una de mis frases reiterativas ¡pucha weón!, claro el chulito sabe que dependiéndo de la entonación se le atribuye sentido. Cosas raras pasan en la vida y pienso en esa figura del péndulo que va y viene y claro a veces las cosas inexorablemente vuelven y con esto me refiero a 2 personas en concreto: Fabián y Carla. Puedo pronosticar con casi el 100% de certeza lo que va a ocurrir con Fabián: nos juntaremos, después de una película y tal vez un café erminará deciéndome que no ha encontrado a otra mujer como yo, que de mí aprendió tanto y otras tantas cosas que hasta cierto punto me agradará escuchar, pero claro, luego vendrá mi ira y le diré que si significaba tano para él no me hubiera dejado, que las cosas serían distintas y terminaremos la discusión en un largo beso con sabor a otra despedida melodramática al tipo teleserie venezolana que me carga.
Respecto a Carla, debo decir que fuimos muy amigas, tan amigas que casi eramos hermanas, claro pero algo pasó, entre buscar explicaciones o culpables, que para el caso es lo mismo, la amistad murió o se estancó, no lo sé a ciencia cierta, lo que si debo reconocer es que ver su post me emocionó bastante, los recuerdos se agolparon en mi cabeza (y son hartos!) y me dá por recordar y recordar. Debo confesar que me perturba un poco el hecho de que en Santiago vivimos a menos de 2 cuadras de distancia y que no nos visitamos, quién sabe por qué y claro nuestras conversaciones se han remitido a un: hola, cómo estás, cómo te ha ido en la u, bien?, que bueno!, pucha que estés bien... como podrán notar un dialogo poco memorable para tantos años de amistad y más aún de experiencias. Si lees esto, cosa que espero, creo que más que un post nos merecemos una conversación con una buena taza de café y varias horas disponibles, han sido años y en ese tiempo pasan no pocas cosas y claro, nuestras neuronas deben aún conservar algo de su esencia y total la agrónoma y la abogada pueden esperar fuera...

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Me parece totalmente necesario eso de la taza..en realidad de las tazas de café, me encantaría poder viajar a hablar contigo, pero es que el dinero no abunda...cuando sales de vacaciones???...vendrás a santiago??,
Es extraño pero para mi también es bastante perturbador el echo de vivir tan cerca y no vernos nunca, yo creo que es el miedo de enfrentar lago que tarde o temprano tenemos que afrontar, esa pregunta ¿que paso?., por que por mi parte no pienso dejar esta amistad, que por lo menos para mi, esta estancada y no muerta, pues se que después de un dialogo necesario comenzare a expulsar historias, experiencias, sentimientos que solo contigo puedo, y es que me conoces, y a pesar del tiempo, así no mas, la confianza se gana y es difícil perderla, el tiempo no la estropea.
en fin..y al fin...espero a que vengas a Santiago.
con respecto a la esencia de las neuronas...era que no funcionaban...jajaja...invadidas en la tontera...esa agradable sensación de no pensar...solo mirar y nada..de ves en cuando analizar algo que a nadie mas le importaba, helados de chocolate de $50 donde el "Gato", tardes soleadas en la calle, bicicletas, patines, jajaja,,,como olvidarlo?? SIlvio Rodríguez...echadas en un sillón...y que apesar de que solo eran dos cuadras nos turnábamos para quedarnos en las respectivas casas por que siempre había algo que conversar...siempre...y al perecer esta no es la excepción
donde puedo saber tu mail????

Totoro dijo...

el titulo habala de "EMBORRACHARSE" y no tomar 1 y tantito ... chulita

:::ninfa::: dijo...

Chuli!, tú de sobra sabes que soy "chapita"... no le pidas peras al olmo!!!