Tiempos de incertidumbre.

Por estos días la vida se me está pasando bastante intranquila, de todo estoy haciendo caldo de cabeza y eso, sé de sobra que no es bueno. Si solo pudiera "disfrutar el momento" como me han dicho en reiteradas ocasiones, pero el gran problema es que creo que necesito un cambio, como que siento que todo lo que tenía que hacer acá ya lo hice... en resumen me siento estancada, muy estancada y me vienen esas ganas irreprimibles de volver a Santiago, a mi casa, con mi familia y "demases", estoy bastante confundida. Por una parte pienso ¿para qué volver?, acá tengo una vida, amigos, mi carrera y planes (pocos, pero hay), pero por otra pienso en todo lo que mi madre me ha dicho, en cuanta razón tiene respecto de puntos cruciales: mi vida estaba primero allá y yo decidí dividirla hace tres años ya... ¡qué hago!, por ahora solo he estado barajando las únicas dos opciones que tengo: volver o quedarme, el mayor problema sin duda es que el corazón lo tengo atado allá y contra eso no puedo luchar, es una batalla sin razón de ser.