¿Y qué pasó aquí?

¿Han notado que a veces la vida se esfuerza en hacernos recordar lo que fuimos antes?... y no me refiero sólo al aspecto físico si no que también a nuestro interior, “esa” parte que nunca terminas de revelar simplemente por que nunca la terminas de conocer… ¿es frecuente utilizar la frase “hasta yo me desconozco”?, es decir, ¿reaccionamos muy a menudo de manera inexplicable?. No lo sé, pero hoy después de un encuentro inesperado con un “amor de adolescencia” me doy cuenta de que si… hoy me desconocí. Puede ser por “ese algo” particular que sentí (¿sensación?) que de verdad, me descolocó, no podía controlar “eso” y mi pánico iba en aumento al ver que inevitablemente terminaría sentada con él en una micro y la peor parte… respondiendo preguntas de mi vida… ¿Cuál es el afán de preguntar cosas que sabemos que incomodan?, ¿qué necesidad satisfacemos haciendo eso? ¿O es simplemente la maldad que per se esta dentro de todos? (aunque sea en mínimas cantidades)… no lo sé pero lo único que saqué en limpio de esa “conversación” es que por ningún motivo debía mirar atrás en dirección a esa micro que estaba parada ante un semáforo en rojo (aparte dentro mio tenía mi propio semáforo en rojo en esa dirección), ¿para qué mirar?, si ese rostro ya lo conozco de memoria, por eso seguí, como si nada hubiera pasado, como si nunca hubiera escuchado la palabras que en su “monólogo” pronunció (bla bla bla!), partí directo al metro, saqué mi libro y me perdí en un mundo que no es el mío pero que me agrada más que el propio…


[Y es que siendo sincera, es inevitable no sentir “algo” por quien en algún momento de tu vida sentiste “todo”.]